Frómista y los judíos

El misterio de los Judíos en Frómista. Así podía llamarse una película de intriga sobre lo ocurrido con el pueblo judío en nuestra villa.

Los judíos se puede decir que siempre estuvieron en Frómista, puesto que en el siglo XI, bajo el reinado de Fernando I, estos formaron parte de la repoblación de toda la zona palentina. Se incrementaron en número con Alfonso X, alcanzando las 200 familias, que supondría un millar de personas, alcanzando así el 25% de la población fromisteña hasta su expulsión por los Reyes Católicos en 1492.

Uno podría suponer que el legado dejado por este pueblo, dada la cantidad de personas que vivieron aquí debe ser importante, pero nada más lejos de la realidad. Nada es lo conservado de la estancia de los judíos en Frómista. Como si la tierra se lo hubiese comido, los vestigios son inexistentes. 

Solo podemos mencionar un par de detalles en relación a esta cultura. Uno, el protagonismo de Matutiel Salomón como prestamista en el Milagro de Frómista, que otro día contaremos, y otro, el apodo por el que todavía hoy conocen a los fromisteños allá donde vayan. Y es que, si a alguna persona local de Frómista, le saludan llamándolo judío, no solo no le extrañará, sino que contestará agradecido.

Piedra del Milagro

Pozomingo. Los romanos en Frómista

Uno de los grandes desconocidos de nuestra villa es la fuente de Pozomingo. En realidad sería más correcto llamarlo aljibe de época romana, pues era su función en los tiempos en que este pueblo se instalaron en nuestra tierra.

Su localización exacta se puede encontrar a 2 kilómetros del núcleo urbano de Frómista, quizás por eso algo olvidado y es la punta del iceberg del mundo romano en Frómista.

Fuente de Pozomingo

La antigua frumentum, tiene más que demostrada su relación con los romanos (de ahí deriva su actual nombre) y este aljibe de Pozomingo invita a pensar en un asentamiento en forma de villa romana en las tierras colindantes. Tenemos varios ejemplos visitables de estas edificaciones en la provincia de Palencia aunque en nuestro subsuelo siguen estando la mayoría de los restos que los romanos dejaron a su paso

Sea como fuere, lo que está claro es que, hoy, es una opción de paseo agradable que desde el centro y a través de uno de los barrios bodegueros de Frómista nos lleva a ver el vestigio romano de Pozomingo.

ASOCIACIÓN DE MUNICIPIOS DEL CAMINO DE SANTIAGO

El Camino de Santiago ha permitido a lo largo de los siglos,un continuo intercambio de experiencias sociales y culturales entre países europeos que ha supuesto, en su ya milenaria historia, un incesante intercambio de conocimientos.

Estas son las primeras palabras que uno puede leer en la web de la Asociación del Camino de Santiago si accede a ella. Parece obligado que después de esos siglos, todos esos municipios (ciudades, villas, pueblos, aldeas...) se asocien en busca de mejorar la expansión de esta magna ruta y la colaboración entre ellos.

Hoy el Camino de Santiago atrae a miles y miles de peregrinos de todos los rincones del mundo en busca de la tumba del apóstol en Santiago de Compostela y eso debe ser el impulso que una, si cabe aún más, a todos los participantes de esta interesante apuesta.

Frómista, como no podía ser de otra manera, pertenece a la asociación y acude a cada una de las reuniones con el ánimo de colaborar y a la vez poder ser parte de un proyecto que busca hacer más atractiva nuestra localidad.